24 ago 2014

BKR

He de confesar que yo también he caído en las redes. Pero he de decir que ha sido por necesidad, lo juro.

Imagino que a estas alturas la mayoría de nosotros ha oído hablar de las famosas botellas de fundas de silicona coloridas que respetan el medio ambiente y que una vez las ves no te las puedes sacar de la cabeza. Es decir, de las BKRs

Por si hay alguien despistado un pequeño resumen:

Bajo el lema "LOVE ALWAYS WINS",Tal Soltz y Kate Cutler, crearon una botella de cristal recubierta con una funda de silicona blanda y de múltiples colores a elegir con el fin de minimizar el impacto medioambiental y el tráfico de agua (y su correspondiente plástico) entre continentes  de la forma más chic posible. 
Como no, las celebrities del momento fueron las encargadas de lazarlas a lo más alto y de que a gente como a mi nos llegara a los oídos. 

Podéis leer más haciendo click AQUÍ


                                    
                                                    Ejemplo de celebrities con bkr


La cuestión es que con el objetivo de llevar una vida saludable, entre otras cosas, me vi en la necesidad de beber más agua, ya que bebía muy poca, y eso era un hábito a cambiar urgentemente. Como no se necesitan grandes esfuerzos económicos para empezar a cambiar las cosas comencé con un pequeño termo que tenía por casa y poco a poco me fui bebiendo mi 1,5-2 litros de agua al día. 
En ese momento me di cuenta de algo que en realidad ya sabía, el plástico deja sabor. En cuanto el agua ya no estaba fría al beber notaba cierto sabor artificial, como a plástico y eso no me gustaba. A parte de saber mal no creía que fuese muy sano. Así que empecé a investigar y di con estas FABULOSAS botellitas. 

Son de cristal, y están recubiertas con silicona, hoy un montón de colores a elegir y son muy cómodas de llevar gracias al diseño del tapón. El hecho de que sean de cristal y no de plástico hace que no coja ningun tipo de sabor el agua, de esto doy FE. Se pueden lavar en el lavavajillas y son, de verdad, muy muy cómodas.
Necesitaba hacerme con una, así que el siguiente paso era saber dónde encontrarlas. 

Vivo en Pamplona, así que eché mano del todo poderoso Google, y di con un par de páginas on-line donde las vendían. Una de ellas era de una tienda de Logroño (creo recordar) y otra era la página oficial de BKR. 

Decidí hacer uso de esa primera página ya que tenían el color que de primeras me había gustado más. Pero en mi impulso de " lo quiero, y lo quiero rápido" (si, a veces soy así, para qué negarlo) me di cuenta de que tal vez hubiese algo más cerca así que seguí buscando. Pero decidí cesar mi búsqueda hasta unos días más tarde ya que este mes iba a tener una serie de gastos y quería gestionar bien la economía. 

Unos días después, desde el coche aparcado en un parking de un conocido centro comercial de Pamplona busqué desde mi móvil y di con una página de facebook:


                                                   THE CARE STATION 


Y aunque estaba diluviando en la calle ya me disponía yo a ir hacia esa dirección, pero la intuición femenina me dijo que preguntase primero, y así lo hice. Escribí un mensaje privado a la página y la persona que gestiona su facebook fue muy rápida en responderme (desde aquí le doy las gracias por la rapidez y amabilidad) diciéndome que no tienen tienda física pero que me podía facilitar los lugares donde podría adquirirlas.

Apunté la dirección. Busqué el lugar en cuestión para conocer el horario de apertura y unos días después fui. Esa también fue toda una odisea (así sin enrollarme mucho: me perdí con el gps, cuando llegué comprobé que todo era zona azul y no llevaba suelto, así que me tuve que ir a un parking que no quedaba tan cerca, luego volví andando hasta la tienda para comprobar que estaba cerrada aunque era lunes por la mañana. Después me enteré que en agosto los lunes por la mañana cerraban, así que mi gozo en un pozo).

Unos días más tarde volví, esta vez con mi dinerito suelto en la cartera para poder aparcar en la maldita zona azul.
Entré en la tienda y... allí estaban. Perfectamente colocadas en una mesita de madera. Varios colores (solo les faltaba el naranja, me dijeron) y entre ellos allí estaba el que yo quería: GLOSS (aunque al ver el tono cupcake tuve dudas).
Ni corta ni perezosa me hice con ella y me fui a mi casa más contenta que unas pascuas.


El precio: 35€. No, no es una botella barata y en estas cosas siempre da un poco de miedo pensar que vas a gastar el dinero en algo que es caro para lo que es, pero me he dado cuenta de que ha sido una buenísima inversión. Es algo que uso todos los días, varias veces porque la relleno varias veces (es de 500ml), es muy cómoda, es bonita, no te cansas de mirarla, se lava fácilmente, el agua no sabe a plástico, el frío se conserva más tiempo, su asa es muy cómoda para llevarla en la mano, la silicona recubre la base de manera que no se resbala en las superficies, y sobretodo, anima a que al llevar el agua encima, como si fuera un complemento más, bebas más agua.


Como veis necesitaba contaros todas estas cosas, por si estáis algo indecisas aun o por si no la conocíais.

Si sois de Pamplona no dudéis en poneros en contacto con THE CARE STATION (en su web venden también múltiples productos sobretodo para el cuidado capilar aunque no BKR) y seguirle en su facebook e instagram pues os informarán de todas las novedades.

Yo estoy feliz con mi BKR. Me voy a rellenarla una vez más!

Besos!

Si queréis podéis visitarme en Facebook e Instagram! Encantada de recibiros!





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